Cuenca, debido a su gran extensión, riqueza y variedad cultural, es un entorno ideal para la arqueología.
En su visita a Cuenca, no se puede obviar la gran variedad de Museos en Cuenca con los que deleitarse en sus vacaciones o escapada de fin de semana. Entre ellos, el Museo Arqueológico, con tres plantas de exposición, correspondiendo la planta baja a la Prehistoria; la planta primera es donde se expone la arqueología clásica y en la segunda planta se exponen objetos de época medieval, moderna y tardorromana, todos ellos procedentes de la misma provincia de Cuenca.
Unas vitrinas están dedicadas al Neolítico, otras al Paleolítico y en todas ellas se muestran objetos de cerámica y metal. Se exponen ejemplos de los yacimientos como los de Cervera del Llano ó los de Quintanar del Rey.
También se exhiben símbolos de religiosidad ó de orfebrería así como las formas de enterramiento.
De la Edad Media se exponen ejemplos de poblados amurallados así como sistemas de enterramiento y del mundo de las creencias religiosas. La importancia de la metalurgia se expone en varios objetos, elementos ornamentales, útiles, clavos, armas, arreos de caballos, objetos de escritura y de la vida doméstica.
No sólo en la capital usted puede disfrutar de este arte, también en toda la provincia de Cuenca puede descubrir rincones de gran riqueza arqueológica, como pueden ser las ruinas de Valera, pueblo situado hacia el sur de la provincia de Cuenca, a pocos kilómetros de la capital ó el Parque Arqueológico de Segóbriga, ubicado en el pueblo de Saelices, hacia el oeste de la provincia, entre las capitales de Madrid y Cuenca, a unos 60 kilómetros de Cuenca.
Segóbriga se sitúa sobre un cerro. Para hacerla más impresionantes se alzaron tres puertas monumentales que se abrieron en la muralla. A ambos lados de la vía de entrada por la puerta principal se construyó un teatro y un anfiteatro destinados a grandes fiestas y actos colectivos.
Nada más atravesar la puerta principal de entrada a la ciudad se construyó el foro, formado por una gran plaza enlosada y rodeada de pórticos y de los monumentos urbanos más significativos, como la curia y la basílica.
Uno puede deleitarse con todos los rincones que esconde Cuenca y su provincia y con todos sus tesoros arqueológicos, sin parangón.
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Disfrute recorriendo y descubriendo Cuenca.
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